Hoy se conoció por parte del Presidente del Club Atlético Peñarol, Ignacio Ruglio, la
propuesta que le realizará a su par de la Asociación del Fútbol Argentino, Claudio «Chiqui»
Tapia, de qué su club y Nacional se incorporen a la Fase Final de la Copa Argentina.
Desde el punto de vista del impacto marketinero que pueda tener no hay ninguna duda que
sería una buena noticia. Desde el costado deportivo puede ser un arma de doble filo.
Por un lado cualquier equipo argentino tiene otra forma de entrenar y jugar al fútbol, sin
mencionar el rodaje (ya que allí se juegan más partidos), y por el otro parece insensato
sumarse en el último tramo siendo que hay equipos que ya han pasado por las diferentes
etapas de clasificaciones.
Parecería mejor plantar la semilla para qué, a futuro, los grandes de nuestro país puedan
competir desde el arranque. Por supuesto que esto implicaría un cambio también en el
calendario del fútbol local.
De darse esto, se estaría haciendo realidad una vieja aspiración de antiguos dirigentes qué
decía que a los grandes les conviene jugar en el fútbol argentino ya qué brinda más vidriera y
por consiguiente mayores ingresos.
